Templo de Meenakshi Amman

Escrito por Marié

13 de diciembre de 2021

Historia y leyenda

El templo de Meenakshi Amman en India del Sur es uno de los mayores lugares sagrados para los hindúes.

 

Templo de Meenakshi | IndiaMagica

– Fuente fotográfica: Poras Chaudhary, The New York Times/Redux

El templo de Meenakshi Amman está situado en la India, en la ciudad santa de Madurai, una de las ciudades habitadas más antiguas del mundo y conocida como uno de los más importantes centros de peregrinación hindú. Con una historia documentada que se remonta al siglo 3 antes de Cristo.

Lo que destaca sobre el muro de 6 metros de altura que rodea el complejo, es un faro que sirve de guía a los 15.000 devotos que peregrinan al estado de Tamil Nadu diariamente.

Meenakshi es un templo que impresiona por su color y por su espectacular estructura.

El templo, dedicado a la diosa Meenakshi (la encarnación de la diosa hindú Parvati) es uno de los pocos monumentos religiosos en la India dedicados a una deidad femenina. Conocida como la diosa de los ojos de pez debido a que sus ojos tienen una forma perfecta.

Meenakshi representa la fertilidad y el amor.

El templo es una celebración de la unión divina entre ella y su amante, Sundareshvara (Shiva en el hinduismo). En el corazón del complejo se encuentran los monasterios a los que el templo debe su nombre. Cada tarde, Sundareshvara es transportado a la alcoba de plata de Meenakshi en una elaborada procesión, antes de ser devuelto a su propia alcoba durante los rezos matutinos.

 

Diseños del techo

– Fuente fotográfica:  Imagebroker/Alamy Stock Photo

El templo Meenakshi Amman, está construido como una enorme estructura de planta rectangular rodeada por altos muros que consta de tres zonas concéntricas enclavadas alrededor de los dos santuarios principales.

Como un ejemplo de la arquitectura dravídica, se observa que toda la ciudad se ha construido y se sigue construyendo alrededor del templo.

Torres

Este gran complejo religioso está custodiado por doce torres pasarela, conocidas como gopuram. Entre ellas la más alta es la torre sur, construida en 1559 y con más de 50 metros de altura. La torre oriental es la más antigua de todas y data de 1226.

Es famoso por su enorme tamaño y sus elevadas gopurams, delimitadas por pilares decorados. Las cuatro entradas principales del templo son únicas de esta edificación, y cada una está orientada hacia los cuatro puntos cardinales.

De forma impresionante, cada una de estas 14  torres tiene miles de figuras de piedra pintadas de colores diversos, representando a animales, demonios y dioses de la tradición hindú. Estas figuras crean un gran impacto visual tanto de cerca como de lejos.

Las figuras que cubren las torres de Meenakshi Amman, les dan un aspecto antiguo y futurista que destaca en la vista del horizonte de Madurai.

La más alta mide 51 metros de altura. Las estatuas se repintan y se reparan cada 12 años.

Sala de las Mil columnas en Meenakshi AmmanEl Salón de los Mil Pilares, que hace las veces de museo del templo, también exhibe una elaborada escultura tallada sobre cada columna.

Los hindúes tamiles empezaron a construir el templo en el año 600 d.C., antes de que fuera destruido por los conquistadores musulmanes en el siglo XIV.

Unos 250 años después, el lugar sagrado fue reconstruido durante el siglo XVI, dando forma a la magnífica estructura que admiramos hoy en día.

 

Fuente fotográfica: Sala de los Mil Pilares – Tom Bradnock / Flickr.com

Es uno de los templos más extraordinarios e impresionantes del mundo

Según la antigua literatura tamil, fue construido originalmente por los supervivientes del continente perdido de Kumari Kandam, un continente legendario que se extendía sobre el océano Índico.

En el interior del templo hay infinidad de corredores, varios porches de gran tamaño y enormes salas. También se encuentra el estanque sagrado, conocido como Pottamarai Kulam, adornado con una gran escultura de un loto dorado en su centro.

Este estanque, también llamado estanque del Loto de Oro se encuentra rodeado de columnas y pinturas murales, provenientes de artistas anónimos del siglo XVII. Allí se bañan aquellos devotos que, en días de luna nueva o en eclipses, quieren ser bendecidos y que se les cumplan todos sus deseos.

También dentro del complejo religioso se observan dibujos que representan algunos episodios de la milagrosa Thiruvilayadal o dama del Dios Shiva, mientras que otros dibujos sobre la pared norte recitan los 64 milagros del Dios Shiva.

Al caminar dentro del templo, nos toparemos con elefantes vivos, decorados con formas y colores en su piel, que bendicen a los fieles y dan buenos augurios a los recién casados.

Sala museo

En la sala de los Mil Pilares (aunque contados son solo 985) bellamente esculpidos en estilo dravidiano, que actualmente es un museo, se aprecia una valiosa muestra de esculturas de dioses, artísticamente elaboradas en piedra y bronce.

Antiguamente, este fue el lugar de encuentro de la Tamil Sangam, la antigua academia de los poetas. Para juzgar el valor de cualquier obra literaria las lanzaban al estanque y únicamente aquellas que no se hundían eran consideradas dignas de literatura.

Sesenta sacerdotes custodian el templo, los mismos habitan en una zona donde no se puede acceder. Como algunas otras partes que están restringidas a visitantes donde únicamente tienen acceso creyentes hinduistas.

Si quieres entrar al templo de Meenakshi Amman, como muestra de respeto y costumbre en todos los templos hinduistas de la India, debes entrar descalzo.

“La relación espiritual es mucho más preciada que la física. La relación física sin la espiritual es como el cuerpo sin alma.” -Mahatma Gandhi-

Meenakshi

– Fuentes: Vinoth Chandar, Arian Zwegers, Strudelt, Cotaro70s

Muchos consideran que el templo de Meenakshi es tan importante para India del Sur como lo es el Taj Mahal en India del Norte. Los peregrinos llegan en masa para visitar el complejo para la meditación en solitario, unirse a los rezos dirigidos por los sacerdotes brahmán o bañarse en el estanque con flores de loto doradas, que según la leyenda conceden el éxito a aquel que se sumerja.

– Fuentes: nationalgeographic, viajerosdelmisterio, diariodelviajero

 

Leyenda

Según la leyenda la diosa Párvati asumió una forma terrenal en el aspecto de una niña, que fue dada al rey Malayadwaja Pandya y su esposa. La niña tenía tres pechos, pero se le dijo al rey que uno milagrosamente desaparecería cuando conociese al hombre que iba a ser su marido.

 

El rey instruyó cuidadosamente a su hija adoptiva en los 64 sastras (los campos científicos hindúes) y, por supuesto, en el arte de la guerra.

Esta tutoría sería muy útil ya que la joven princesa tendría que conquistar los “tres mundos a través de ocho direcciones” antes de su coronación. Así lo hizo y ella estaba a punto de reclamar la victoria final cuando estuvo cerca de vencer a Shiva.

 

Sin embargo cuando vio a Shiva su tercera mama desapareció y se dio cuenta no solo de que iba a ser su marido, sino que también era la encarnación terrenal de Párvati. Su coronación fue seguida rápidamente por el matrimonio.

 

Para la boda nobles de todo el mundo se reunieron en Madurai y la pareja gobernó la ciudad durante muchos años. Finalmente tomaron las formas divinas de Sundareswarar y Meenakshi que son los dioses soberanos del templo. Su matrimonio se celebra durante los 10 días del festival Meenakshi Tirukalyanam en abril o mayo, el cual atrae a más de un millón de visitas.

 

¡Namasté!

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

También te puede gustar…

Porque la vida es así

Porque la vida es así

En una de mis terapias, aunque suene raro, siguiendo el consejo de alguien que susurró en mis oídos, le dije a la...

Las cosas que nos definen

Las cosas que nos definen

Buenos y lluviosos días. Hoy quiero reflexionar sobre las cosas que nos definen. Aún sin saber si nos define una sola...

Tu también puedes

Tu también puedes

Parece que el mundo de hoy está basado en un entrenamiento continuo e increíble que nos quiere convencer para aceptar...